sábado, 27 de junio de 2009

Mientras los meses pasan...

Con un toblerone y una cocacola me dispongo a llenar este folio blanco, a corregir el error de dejar de lado mi blog, a volver a conectar con quienes estáis tan lejos pero tan cerca gracias a estas líneas. No sé muy bien por qué pero me gustaría tener algún disco de Sabina aquí, y escucharlo ahora. Me apetece alguna de esas viejas canciones.... de las que me recuerdan a mi infancia, a los años de cole y uniforme, a las amistades que se convierten en familia.

Aquí han pasado los meses y hemos tenido tantas visitas que ya no recuerdo ni las fechas. Así es fácil que el tiempo vuele. Las familias, los amigos, mucho habéis pasado por aquí dejando tantos buenos momentos, y otros acabaréis viniendo porque este es un trocito del paraiso –como Sela es otro-. Y me hace pensar en el abuelo, que siempre decía que en Sela sólo faltaban Adán y Eva. Qué cosas, ya tenía yo a Adán conmigo antes de que él se fuera, pero no llegó a verle en su paraiso. Aquí sólo falta Eva, tal vez por eso muchos han tomado la estúpida costumbre de llamarme así, Eva.

Desde mi ventana veo a lo lejos la bahía, y todas las tardes me sorprende la puesta de sol justo detrás de los últimos edificios de la ciudad, donde se mezcla el cielo con el mar. Unos dias me sorprende esa montaña que aunque está justo ahí, la mayoría de los días no se ve, y después de tantos meses sigo sin saber por qué.

Han empezado las lluvias y los tifones. Hay días grises en los que parece que mañana nunca llegará, y por las noches las tormentas no me dejan dormir porque me agitan como a una niña. Con los pies en la cabecera de la cama y la almohada a los pies para ver mejor por la ventana, me maravillo con cada rayo y cada trueno. Se ilumina la habitación y juego a hacer sombras mientras con cada vibración le pregunto a Mr. A “¿lo has notado en el estómago?”. A veces él está tan fascinado como yo, otras no, pero los dos sabemos que después de la tormenta llega la calma. Y así, pasados unos días grises, llega el cielo azul y el sol arde con fuerza, como hoy.

Así que me voy con mi música a otra parte, a disfrutar del día, pero nos vemos por aquí de nuevo pronto.

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